Los problemas de desabasto de agua que “sufre” la ciudad de Ensenada no podrán ser resueltos en un corto plazo, pues las dos principales fuentes de suministro han sido afectadas por causas ajenas a la Comisión Estatal de Servicios Públicos.
Javier Vera Delgado, director de la Cespe, señaló que se trabaja en la apertura de nuevos pozos y rehabilitación de algunos ya en operación, pero el déficit que se tiene actualmente por la reducción de la planta desalinizadora y del llamado Flujo Inverso, no se podrán remediar prontamente.
Explicó que en el caso de la planta desalinizadora, la cual debería estar suministrando 250 litros por segundo, apenas se tenía un abasto de 110, 120 litros por segundo -o incluso en ocasiones menor-, más se indica que no podría aumentar sus volúmenes hasta el mes de diciembre.
Flujo “en reversa”
Con respecto al Flujo Inverso -red de suministro que trae el agua de Mexicali y que pasa por Tijuana-, el agua que se envía depende de las necesidades de los tijuanenses, por lo que de los 230 litros por segundo que deberían estarse enviando de manera permanente, se envían de 110 a 130 litros por segundo y de una manera intermitente y no forma continúa.
Ambas reducciones se reflejan en el abastecimiento de agua de Ensenada y en algunas de las colonias este desabasto es más marcado, reconoció el titular de la Cespe.
Indicó que si bien en diciembre, de cumplir la desalinizadora con ese plazo, y al reducirse los consumos de agua en esa temporada, el desabasto será menor, sin embargo, no será solucionado al cien por ciento.
Fuente: El Vigia
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