MEXICALI.- Eduardo Romero Sánchez realizó un análisis estadístico en los jóvenes de la región de Murcia con datos de 2020, encontrando que la media de deserción de Murcia es superior a la media de España, pero también detectaron grandes diferencias de abandono educativo en diferentes comunidades de España, como del 6.5 por ciento en el País Vasco, 18.7 en Murcia y hasta 25.5 en Ceuta. “Estos datos son preocupantes. Hasta hace poco Malta era el que más abandono escolar tenía en la Unión Europea, ahora es España”.
En relación a México, el experto encontró que, en 2017, el índice de abandono escolar en el mismo nivel (preparatoria), era de 15.2 por ciento, pero resalta que en entidades como Ciudad de México la tasa de abandono fue del 20.6, 18.6 en Guanajuato, y para Baja California la media fue de 16.5. Entre los estados con menores cifras se encuentran Veracruz con 11.3 y Puebla con 10.5 por ciento.
Dicha información, la compartió Romero Sánchez durante su participación en el Seminario Permanente del Doctorado en Educación de CETYS Universidad, Campus Mexicali, así como también sus experiencias en investigación educativa, con la ponencia titulada “Desigualdades educativas y deserción escolar, una investigación cualitativa desarrollada en España” en jóvenes de nivel medio superior (el equivalente en México), en ella detalla datos que pueden ser aprovechados por los docentes y centros escolares en este país.
“Cuando se enfrentan a un fracaso escolar, por ejemplo, tenemos una primera voz de alarma que podemos atender, la deserción no es de un día para otro, hay señales previas, factores que nos indican que al joven podemos perderlo; el segundo momento es el abandono y en ocasiones tenemos una tercera voz que es el retorno a la escuela, pero no siempre se da”, señaló el académico.
Respecto a los factores que influyen en el abandono escolar, indicó el catedrático, son: personales, que refiere a la capacidad del estudiante sobre aspiraciones, expectativas o discapacidad; racionales, cuando indican que no contaron con el apoyo de sus padres, situación interna familiar; estructurales, que son los externos a la persona y se relacionan con el entorno laboral, económico y social; institucionales, los que se refieren a las políticas públicas socioeducativas, los centros escolares y el profesorado.
El académico enfatizó que, el abandono escolar es complejo y multifactorial. Puntualizó que es posible atender estos puntos, sobre todo los que aquejan a los profesores, las escuelas y las familias, para que se motive a los jóvenes para continuar sus estudios. Los que serán difíciles de atender tienen que ver con la situación económica o laboral.
FUENTE: EL MEXICANO
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