Tras continuos recortes a su tasa de interés referencial desde agosto de 2019 y dos ocasiones en las que la ha dejado sin cambio, el Banco de México (Banxico) elevó a 4.25% la tasa que representa el costo del dinero.
Todos los pronósticos de analistas preveían que el banco central mantendría nuevamente sin cambios la tasa de interés pese a que persisten altos niveles de inflación local, según un sondeo de Reuters.
Este mismo jueves, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que la inflación en la primera quincena de junio se aceleró 6.02%.
En una decisión divida, la Junta de Gobierno de Banxico decidió por mayoría de tres integrantes subir en 25 puntos la tasa de interés interbancaria a un día, a un nivel de 4.25%.
Dos miembros de la Junta votaron por mantener dicho objetivo en 4%, detalló la institución en un comunicado.
Este mismo jueves, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que la inflación en la primera quincena de junio se aceleró 6.02%.
En una decisión divida, la Junta de Gobierno de Banxico decidió por mayoría de tres integrantes subir en 25 puntos la tasa de interés interbancaria a un día, a un nivel de 4.25%.
Dos miembros de la Junta votaron por mantener dicho objetivo en 4%, detalló la institución en un comunicado.
En su comunicado, Banxico advirtió que la actualización de las trayectorias esperadas para la inflación general y subyacente en los próximos trimestres son más elevadas que las publicadas en el último informe trimestral.
Ahora se estima que la inflación general converja a la meta de 3% en el tercer trimestre de 2022, detalló.
“En este contexto, se consideró necesario reforzar la postura monetaria a fin de evitar afectaciones en las expectativas de inflación, así como para lograr un ajuste ordenado de precios relativos y propiciar la convergencia de la inflación a la meta de 3%”, apuntó el Banco.
El movimiento fue sorpresivo, ya que los analistas esperaban unanimidad en Banxico para que mantuviera inmóvil el costo del dinero.
“No fue el mejor manejo de expectativas de mercado, pero el movimiento era necesario para anclar expectativas de inflación”, opinó Joel Virgen, una analista independiente, quien fue economista en jefe para México de Citibanamex y BNP Paribas.
La institución monetaria destacó que si bien los bancos centrales de economías avanzadas mantuvieron sin cambios sus estímulos monetarios, ahora prevén que se mantengan por menos tiempo.
La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos dijo en su anuncio de política monetaria de la semana pasada que algunos de sus miembros anticiparon que la primera alza a su tasa de referencia sería en 2023, y ya no en 2024, lo que provocó una depreciación del peso de 5% en los días posteriores.
FUENTE:FORBES DE MÉXICO
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