La cantina establecida desde 1892 fue clausurada el pasado viernes por COEPRIS, pero gracias a la intervención de los propietarios de bares y restaurantes en esta cuidad quienes denunciaron actos de extorsión por inspectores de esta dependencia fue destituido el titular en el estado.
Una acción muy oportuna que debe ser ejemplo para que nunca permitamos el mal uso de un puesto publico.
La corrupción se combate con acciones, la denuncia es el principio.
Cantina HUSSONGS abre de nuevo sus puertas bajo todas las medidas de protección para sus clientes y en perfecto estado de higiene.
Un icono de la ciudad lugar predilecto de muchos ensenadenses dio ejemplo que se puede hacer frente a la corrupción y seguir adelante brindado un excelente servicio.
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